Si pudiéramos resumir en una frase cómo ha sido este primer lustro de existencia de Ibesol sería algo así como: “la construcción de un ilusionante proyecto presente y futuro que crece de forma imparable gracias al motor humano que lo impulsa día a día”. Y es que eso es lo que, hace ya 5 años, se propuso Javier Gil, director de la firma y el máximo responsable de que Ibesol sea hoy en día una de las empresas punteras en energías renovables para el hogar y la empresa con implantación en Andalucía, Murcia y Castilla La Mancha.
En septiembre de 2012 abría sus puertas, en Las Quemadas una nueva empresa: Ibesol Energía, especialiada en energías renovables y en la instalación de placas termosolares para hogares. Hoy, cinco años después, la esencia sigue siendo la misma. En la actualidad, la empresa cuenta con unas instalaciones de 2000m2. Además, Ibesol ha realizado una expansión territorial por toda Andalucía, abriendo sedes en Jaén, Granada, Málaga y Sevilla. Fuera del territorio andaluz, Ibesol se ha hecho un hueco en el sector de las energías limpias; Murcia, con sede propia, Alicante y Ciudad Real entre otras, son algunas de las ciudades donde Ibesol ha conquistado a los usuarios ávidos de una alternativa de ahorro y calidad.
Aunque, sin duda, la cifra de la que su director se siente más orgulloso la componen los casi 200 trabajadores que integran, actualmente, la plantilla de la empresa.
En estos cinco años, más de 7.300 clientes han confiado en Ibesol ¿Qué le lleva a poner en marcha una empresa de estas características?
Pese a que una empresa busca siempre un rendimiento económico, Ibesol no es sólo un negocio lucrativo. Es algo más, es futuro. Nos ilusiona pensar que aportamos nuestro granito de arena en preservar el medio ambiente y en concienciar a la sociedad, mientras aportamos soluciones de nergías limpias que ayudan a mejorar la calidad de vida del usuario. Nos gusta saber que formamos parte del proyecto de dejar un mundo mejor para las generaciones venideras.
¿Pensaba que este crecimiento iba a adquirir tal magnitud en tan poco tiempo?
Desde el principio nuestra confianza en el producto nos invitaba a ser optimistas, pero realmente las cifras a día de hoy nos han sorprendido muy positivamente. Durante estos cinco años hemos pasado etapas buenas y otras no tanto. Quizás lo más duro fue el enorme esfuerzo que tuvimos que hacer cuando empezábamos para que entidades financieras y administraciones públicas creyeran en nosotros y nos apoyaran en los inicios que suele ser lo más complicado.
¿Qué hace a Ibesol diferente del resto de empresas de energías renovables que existen?
Sin duda, nuestro compromiso de dar servicio al cliente en el tiempo. Y tener muy claro que este no es un negocio a corto plazo. Esperamos estar siempre al lado de nuestros clientes atendiendo sus necesidades energéticas actuales y las futuras. Y, aunque nosotros no somos perfectos, intentamos hacerlo mejor cada día, para dejar, siempre, al cliente satisfecho.
¿Dónde ve a Ibesol dentro de cinco años?
Con presencia en toda España y con alguna aventura empresarial fuera de ella. Será una empresa consolidada y líder del mercado de las renovables para hogares, empresas y entidades de todo tipo. Siempre a la vanguardia de la eficiecia y el ahorro energético que ofrecen las energías renovables, frente a las fósiles.
