Quemasem ha vuelto a solicitar al Ayuntamiento la correcta iluminación de la glorieta para seguridad de todos y no lamentar accidentes o atropellos.
La Glorieta Louviere es el segundo punto con más tráfico rodado de la ciudad.
El acceso a la Autovía que llega a Las Quemadas con las incorporaciones a la CO-31 y la salida o entrada por Avenida de Libia así como la coincidencia con grandes superficies comerciales y la incorporación a la A-92 lo han convertido desde hace tiempo en uno de los puntos negros de la capital cordobesa. Ante la afectación del acceso a Las Quemadas para empresarios, trabajadores y proveedores o clientes Quemasem ha vuelto a solicitar al Ayuntamiento la correcta iluminación de la glorieta para seguridad de todos y no lamentar accidentes o atropellos.
Esta solicitud ya se realizó en febrero y diciembre de 2023 y se reiteró el pasado mes de agosto, lo que se ha vuelto a reclamar por escrito.
Al igual que el escrito fechado del 21 de agosto, se vuelve a hacer hincapié en el peligro que supone la inexistencia de luminaria encendida en ambas zonas para la circulación de vehículos de todo tipo. Así mismo recuerdan en su escrito que la glorieta Louvière es de gran tránsito para empresas, trabajadores y vecinos de la ciudad, tanto vehículos como de movilidad personal y ligeros que transitan a diario o se acercan puntualmente a Las Quemadas o el nudo de comunicación de Rabanales 21.
Además aclaran que el ramal de acceso de la Glorieta Louvère con la carretera CO-31 también se ve afectada por la oscuridad y penumbra desde hace meses por lo que en aras a la seguridad de los ciudadanos se reitera la solicitud en una tercera ocasión.